Rama: Una amistad es un pacto, un contrato tácito, un acuerdo de palabra sin palabras. Los dos sabemos que eso significa ‘somos hermanos desde los 11 años, y cuando estamos juntos no le tengo miedo a nada’.
Tacho: No hace falta decirte que te quiero mucho, que sos mi hermano, que doy mi vida por vos y eso es literal.
Esperanza: Saber que nadie te va a soltar la mano no tiene precio, ni hay que decirlo, es un pacto silencioso. Paloma: No hace falta que le diga lo que significa para mí, gracias por ser tan generoso. Alai: El sabe todo lo que le debo y lo voy a extrañar siempre. Continua...
Lleca: Las quiero tanto que ya no las quiero chapar.
Nacho: La paradoja de tener un hijo sin haberlo tenido me enseñó que ser padre es hacer un pacto ‘te voy a querer siempre, pase lo que pase’.
Tefi: Prometer que vas a cambiar y lograrlo es cumplir un pacto.
Esperanza: Ser esperanza es fácil cuando a tu alrededor estás llena de amigos, de tíos, de personas que sin decirlo te juran amor eterno. Crecí con vos, me prometiste que siempre ibas a estar conmigo, y a pesar de las paradojas ese pacto sigue firme.
Mar: Estuviste ahí, conmigo, incluso cuando yo no era yo. Quiero hacer un pacto con vos, que por favor entre nosotras el rulo siempre vuelva.
Simón: Siempre supe que ibas a estar, jamás dudé de vos ¿Cómo hago para dejarte ir?
Thiago: Estoy orgulloso de tu lucha, de tu pelea, nunca dudé de vos.
Tacho: Para cruzar el campo de ortigas el melli me dijo que aguantara la respiración, y así fue.
Teo: Mi hermano dio la vida por no tranzar, yo crecí así, pactando con la vida y con la muerte.
Luca: Me juego por ellos porque confío en ellos, y confío porque ellos confían en mí. Ese es mi pacto.
Nina: El me dijo ‘nunca te voy a abandonar’.
Cristóbal: Y nunca es nunca ¿no?
Jazmín: Los gitanos sellan sus pactos con sangre porque la sangre es eso que sos capaz de entregar por los tuyos.
Kika: Todos para uno y uno para todos, es de mi libro preferido, el de Los Tres Mosqueteros.
Luz: Nací en un pacto de silencio, crecí en la desconfianza y viví rompiendo promesas. Hoy necesito nuevos pactos para vivir.
Mar: Mi pacto con vos está escrito en las estrellas, es más fuerte que la distancia y el tiempo, es un pacto que vence al destino.
Vale: Jamás le dije que cuando me siento triste tomo mate cocido y me calma. Ella jamás me dijo que lo sabía. Supongo que eso es un pacto.
Melody: Entenderse con la mirada, esa expresión siempre me pareció tan trillada, vacía. Ahora veo que es un pacto implícito, lleno de sentido.
Vale: Gracias.
Melody: De nada. Diciendo sin decir cumplimos nuestro pacto.
Thiago: Te juro, te prometo, te doy mi palabra. Siempre estamos pactando ¿Para qué lo haremos?
Jay: Yo pacté con mi hija, si la salvaba a ella me iba a perdonar. Pero no la salvé, no cumplí con mi pacto ¿Cómo se hace para vivir con esa traición?
Thiago: No dañar debería ser el mandamiento fundamental. No dañar y no defraudar a los que nos quieren.
Jay: La vida me quitó una y otra vez lo que más amé, me traicionó, rompió su pacto.
Vale: Yo le prometí que siempre iba a estar con él.
Simón: Cuando murió Octavio mi viejo me dijo ‘te prometo que ese dolor va a pasar’, pero no pasó.
Thiago: Un pacto se hace de a dos.
Vale: Juramos sernos fieles. Juramos estar.
Simón: Juramos estar siempre uno al lado del otro.
Thiago: Siempre vas a contar conmigo. Es un pacto.
Simón: La vida te da y te quita. Eso también es un pacto.
Thiago: Un pacto es un refugio. Cuando el pacto se rompe quedamos desprotegidos, a la intemperie. Romper un pacto, como una amistad, es algo imperdonable.
Vale: Hasta que la muerte nos separe.
Simón: Alguien cumplió con su parte del pacto.