
Y eso hizo Nciolás Riera el último fin de semana largo de marzo. Fue a un boliche porteño y no dejó títere con cabeza. Las chicas nunca le faltaron y desde que se separó de Silvina Escudero tiene más candidatas.
La última presa fue una rubia de pelo largo, con quien estuvo hablando muy cerca durante toda la noche del sábado. pero entre charla y charla, miles de chicas se le acercaban para decirle cuánto lo admiraban y si por favor les daba un beso. Por supuesto que Nico no se hizo rogar y accedió con un pico.